viernes, 17 de febrero de 2012

Básicos para evitar el dolor de espalda.


Una vez que alguien tiene dolores de espalda mucha gente se sorprende con lo fácil que pudo haber retardado su aparición o quizá haber evitado tenerlos.
Son cuidados que no revisten cosas del otro mundo, la verdad es que en esta lucha contra el dolor de espalda las acciones preventivas son tan simples que las podemos hacer todos los días.

Siéntese bien. El cuerpo humano es una obra maravillosa de la naturaleza y por ello mismo podemos ver que somos los Hombres quienes por costumbre vamos modificando esa naturaleza. No necesitamos una silla cara o quizá un sillón de marca, con aprender a sentarnos correctamente estaremos haciéndonos un bien.

Coma saludable. Una comida saludable permite tanto a músculos como nervios tener una elasticidad natural que se va perdiendo con el tiempo, el comer d forma saludable ayuda a que si fuéramos a padecer dolor de espalda llegue en otro momento de la vida y no de forma temprana.

Haga ejercicio. El ejercicio es la mejor fuente de salud en todos los sentidos y también ayuda para evitar el dolor de espalda.

Aun en aquellos casos como espondilolistesis, fusión espinal o escoliosis que son enfermedades muy especificas, un especialista puede ayudar a tener un equilibrio óseo que se traduce en disminución de las molestias que el dolor de espalda puede presentar.

Identificando el dolor de espalda.


Con los avances del siglo XXI nadie tiene la necesidad de sentir dolor.

¿Sabe usted que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud el dolor es una constante en la sociedad actual y que no hay suficientes doctores en el mundo para aliviarlo?
Uno de los más comunes es el dolor de espalda.

El dolor de espalda ante la creencia popular es algo que se siente en la espalda que genera dolor, pero los dolores tienen diferentes intensidades.

En un cuadro general, los síntomas de dolor de espalda pueden variar desde dolores de bajo grado hasta fuertes espasmos donde el paciente no tiene control de sus músculos y nervios en la espalda.

El dolor de espalda puede llegar a ser tan molesto que ante la urgencia de aliviar este dolor los lleva a someterse a tratamientos drásticos sin si quiera pensarlo. Hay pacientes que dicen se les consume su vida.


Sobre la Hernia Discal

HERNIA DISCAL
El término hernia discal se refiere a cuando el contenido del disco intervertebral protruye hacia el exterior, más allá del contorno natural pudiendo así ejercer presión sobre la raíz nerviosa en el receso lateral en su salida de la columna y produciendo un dolor irradiado (radiculopatía) por el recorrido del nervio ciático. 

Hernia discal lumbar.

El disco intervertebral se puede dividir en dos partes, un núcleo gelatinoso (núcleo pulposo) y una parte exterior fibrosa (anillo fibroso) que mantiene el núcleo en el centro del disco. Si se forman fisuras radiales en el anillo fibroso, el núcleo puede empujar hacia fuera deformando el contorno del disco. Esto se denomina protrusión discal. Pero si comba demasiado, el núcleo pulposo puede llegar a salir hacia el exterior convirtiéndose en una hernia discal. No todas las hernias llegan a causar una radiculopatía del nervio ciático, sólo aquellas que por su tamaño o posición llegan a ejercer presión sobre la raíz del nervio.
Hernia discal.

Los síntomas de una hernia discal lumbar pueden ser variados, desde un dolor en la zona lumbar sin irradiación hasta un dolor irradiado a la pierna que puede venir acompañado de déficits neurológicos (hormigueos, pérdidas de sensibilidad, atrofia muscular, pérdida de fuerza y pérdida reflejos musculares) que varían dependiendo del nivel lumbar de la hernia discal y la raíz nerviosa del nervio al que afecte.
Distribución de sensibilidad cutánea de las raíces nerviosas L5 y S1.

Con la historia clínica y la exploración minuciosa por parte de un reumatólogo se puede llegar a tener una sospecha bastante fiable de hernia discal pero sólo se puede confirmar mediante un TAC (Scanner ) o una Resonancia Magnética. En unas radiografías no se puede ver una hernia discal.
 
Resonancia Magnética - Hernia discal en L4-L5 (vista lateral- izquierda).

Es importante señalar que no todos los dolores en la zona lumbar que se extienden hacia la pierna por el territorio del nervio ciático, son debido a una hernia discal. Hay otras afecciones de la columna muy comunes que pueden causar un dolor referido al miembro inferior. Normalmente es causado por una lesión mecánica de la zona lumbar como por ejemplo un síndrome facetario, sacroilíaco o piramidal.

Como se mencionaba antes, se puede tener una hernia discal pero no tener ningún dolor. Antiguamente se creía que la hernia discal siempre le causaba dolor a los que la padecían, y que esta suponía un riesgo para el paciente o que podían quedar inválidos si no se operaban. Afortunadamente la evidencia científica disponible hoy en día demuestra que esto no es así. Al empezar a hacer estudios en personas sanas y no sólo en las que tenían dolor resulta que entre el 30% y el 50% de las personas sanas también tienen hernias discales que no les causan ningún problema, por lo tanto, el criterio de tratamiento es, esencialmente, clínico.

La mayoría (>80%) de los pacientes con dolor por hernia discal responden al tratamiento conservador y la cirugía, excepto en casos de hernias muy grandes o dolor incoercible, debe ser considerado un último recurso.

De todas maneras, hay casos en los que es necesaria y recomendable la cirugía, aunque sólo en un 20% aproximadamente de las hernias que producen síntomas. El éxito de la cirugía depende en gran medida de: seleccionar cuidadosamente los casos en los que la cirugía es adecuada (por ejemplo, si es un síndrome de dolor referido el causante del dolor y la hernia presente no es la responsable entonces la cirugía no tendrá éxito), seleccionar correctamente el nivel discal a operar (por ejemplo, si no se correlaciona los síntomas con el nivel de la hernia y sólo nos guiamos por la resonancia se podría operar el nivel equivocado ya que hay hernias que no producen síntomas) , y seleccionar bien la técnica quirúrgica a emplear para cada caso (no la favorita del cirujano o la que deje menos cicatriz).

Una mala selección en estos tres factores es el principal responsable de las cirugías fallidas.

CONSEJOS PARA LA ESPALDA


 CONSEJOS PARA LA ESPALDA


Las causas del dolor de espalda son múltiples y sabemos que ésta es una patología muy frecuente, es fácil comprender la importancia de adoptar unos hábitos posturales correctos, y adecuar el estilo de vida para prevenir el mencionado dolor. Es fundamental, por tanto, conocer los hábitos posturales dañinos para nuestra columna, a fin de ser evitados; así como aprender y practicar aquellos otros que actúan de forma protectora.

En general, LA COLUMNA SUFRE PRINCIPALMENTE:
•            Cuando nos mantenemos mucho tiempo en la misma posición, ya sea de pie, sentado o acostado.
•             Cuando adoptamos determinadas posturas que aumentan sus curvas fisiológicas.
•             Cuando realizamos grandes esfuerzos, o pequeños, pero muy repetidos.
•             Cuando realizamos movimientos bruscos o adoptamos posturas muy forzadas.
Comentaremos a continuación, las Medidas Básicas de Higiene Postural recomendadas para evitar estos factores mecánicos de sobrecarga de la columna vertebral.

MEDIDAS DE HIGIENE POSTURAL
MEDIDAS GENERALES

A.- Organizar nuestras actividades de forma que:
No estemos sentados, de pie, acostados, fregando, etc. durante largos períodos de tiempo, procurandoalternar las tareas que requieran posiciones estáticas de pie, sentado o en movimiento; repartir la tarea en varios días (p.e. la plancha).
Intercalar períodos de pequeños descansos entre tareas, nos servirán para estirarnos, relajarnos, etc.
Modificar de nuestro entorno, sí es necesario, el mobiliario, especialmente mesas y sillas, recordando que lo blando es perjudicial (sofá, sillón, cama), adecuar la altura de los objetos, la iluminación, etc.

B.- De pie o al caminar:
Al estar de pie, poner siempre un pie más adelantado que el otro y cambiar a menudo de posición, no estar de pie parado si se puede estar andando. Caminar con buena postura, con la cabeza y el tórax erguidos. Usar zapatos cómodos de tacón bajo (2-5 cm, Figura 1). Para recoger algún objeto del suelo flexionar las rodillas y mantener las curvaturas de la espalda (Figura 2).
calzadoflexionar rodillas
Para realizar actividades con los brazos, hacerlo a una altura adecuada, evitando tanto los estiramientos si elevamos demasiado los brazos, como encorvamientos silo hacemos con los brazos demasiado bajos.
Evitar las posturas demasiado erguidas (militar) o relajadas de la columna.

C.- Sentado:
Mantener la espalda erguida y alineada, repartiendo el peso entre las dos tuberosidades isquiáticas, con los talones y las puntas de los pies apoyados en el suelo, las rodillas en ángulo recto con las caderas (Fig. 3), pudiendo cruzar los pies alternativamente. Si los pies no llegan al suelo, colocar un taburete para posarlos. Apoyar la espalda firmemente contra el respaldo de la silla, si es necesario utilizar un cojín o una toalla enrollada para la parte inferior de la espalda.

Sentarse lo más atrás posible, apoyando la columna firmemente contra el respaldo, que ha de sujetar fundamentalmente la zona dorso-lumbar.
 sentado
Si vamos a estar sentados con una mesa de trabajo delante, hemos de procurar que ésta esté próxima a la silla, de esta forma evitaremos tener que inclinarnos hacia adelante. También es importante que el tamaño sea adecuado a la estatura, evitando especialmente las mesas bajas que obligan a permanecer encorvado. En general se considera un tamaño adecuado si el tablero de la mesa nos llega, una vez sentados, a la altura del esternón.

Evitar los asientos blandos, los que no tengan respaldo y aquéllos que nos quedan demasiado grandes o pequeños. Igualmente, se evitará sentarse en el borde del asiento, ya que deja la espalda sin apoyo, o sentarse inclinando y desplazando el peso del cuerpo hacia un lado. Si estamos sentados para trabajar o estudiar con una mesa delante, se debe evitar que ésta sea demasiado baja o alta, y que esté retirada del asiento.

D.- Conducir:
Adelantar el asiento del automóvil hasta alcanzar los pedales (freno, acelerador y embrague) con laespalda completamente apoyada en el respaldo, las rodillas en línea con las caderas (ángulo de 90º).Sentarse derecho, coger el volante con las dos manos, quedando los brazos semiflexionados.
Se debe evitar conducir con los brazos demasiado alejados del volante, con brazos y piernas extendidos y sin apoyo dorso-lumbar.

E.- Inclinarse:
Para recoger algo del suelo, se recomienda no curvar la columna hacia delante, sino más bienagacharse flexionando las rodillas, y manteniendo la espalda recta. Podemos ayudarnos con las manos si hay algún mueble o pared cerca.

F.- Levantar y transportar pesos:
Doblar las rodillas, no la espalda, y tener un apoyo de pies firme. Levantarse con las piernas y sostener los objetos junto al cuerpo (fig. 4).
 levantar objetos
Levantar los objetos sólo hasta la altura del pecho, no hacerlo por encima de los hombros. Si hay que colocarlos en alto, subirse a un taburete. Cuando la carga es muy pesada buscar ayuda. No hacer cambios de peso repentinos.

Para transportar pesos, lo ideal es llevarlos pegados al cuerpo, y si los transportamos con las manos, repartirlos por igual entre ambos brazos, procurando llevar éstos semiflexionados.

Se evitará flexionar la columna con las piernas extendidas, llevar los objetos muy retirados del cuerpo, echar todo el peso en un mismo lado del cuerpo y girar la columna cuando sostenemos un peso.

Empujar y tirar de objetos puede ser fácil si sabemos emplear la fuerza creada por la transferencia de todo el peso del cuerpo de uno a otro pie. La forma correcta de empujar es con un pie delante del otroy es la transferencia del peso del cuerpo del pie posterior al anterior la que empuja el objeto. Se realiza con los brazos flexionados, la barbilla retraída, los abdominales contraídos y expulsando aire durante el proceso. Para tirar de un objeto se procede de la forma siguiente: una vez cogido éste, hay que dejarse caer como sí fuéramos a sentarnos en una silla, y es esto lo que nos permite utilizar todo el peso del cuerpo para tirar del objeto. Es más recomendable empujar los objetos que tirar.

G.- Acostado:
Las posturas ideales para estar acostado o dormir, son aquellas que permiten apoyar toda la columna en la postura que adopta ésta al estar de pie. Buena postura es la "posición fetal", de lado, con el costado apoyado, con las caderas y rodillas flexionadas y con el cuello y cabeza alineados con el resto de la columna. Buena postura también es en "decúbito supino" (boca arriba), con las rodillas flexionadas y una almohada debajo de éstas (Figuras 5 y 6). Dormir en "decúbito prono" (boca abajo) no es recomendable, ya que se suele modificar la curvatura de la columna lumbar y obliga a mantener el cuello girado para poder respirar.


                 cama cama2

El colchón y somier han de ser firmes y rectos, ni demasiado duros, ni demasiado blandos, que permitan adaptarse a las curvas de la columna, la almohada baja, la ropa de la cama debe ser manejable y de poco peso (ej. sábana y edredón). Las camas grandes, en general, son más recomendables, en especial si se duerme acompañado, ya que permiten mantener posturas relajadas y cambiar de postura con mayor frecuencia y facilidad.
Se debe evitar dormir siempre en la misma posición, en camas pequeñas, con el somier o el colchón excesivamente duros o blandos, con almohada alta , o en la posición de decúbito prono (boca abajo).

H.- Vestirse:
Se procurará estar sentado para ponerse los calcetines y zapatos, elevando la pierna a la altura de la cadera o cruzándola sobre la contraria, pero manteniendo la espalda recta. Para atarnos los cordones de los zapatos, o nos agachamos con las rodillas flexionadas o elevamos el pie y lo apoyamos en un taburete o silla.

I.- Levantarse o sentarse de una silla o sillón:
Para levantarnos, primero apoyar las manos en el reposa brazos, borde del asiento, muslos o rodillas; luego, desplazarse hacia el borde anterior del asiento, retrasando ligeramente uno de los pies, que sirve para apoyarnos e impulsarnos para levantarnos (Fig. 7). Debemos evitar levantarnos de un salto, sin apoyo alguno.
Para sentarnos, debemos usar también los apoyos, y dejarnos caer suavemente. No debemos desplomarnos sobre el asiento.
levantar silla
J.- Levantarse de la cama:
Lo ideal es flexionar primero las rodillas, girar para apoyarnos en un costado, e incorporarnos de lado hasta sentarnos, ayudándonos del apoyo en los brazos. Una vez sentados al borde de la cama, nos ponemos de pie apoyándonos en las manos (Fig. 8).
 levantarse de la cama
K.- Asearse:
Hay que tener en cuenta la altura del lavabo, porque la excesiva flexión del tronco para asearnos, no provoque dolores lumbares. La postura correcta será agacharnos con la espalda recta y las piernas flexionadas(Fig. 9).
 

HIGIENE POSTURAL EN LOS ESCOLARES
La frecuencia, cada vez mayor, de dolor de espalda y patologías de la columna vertebral, ha creado una gran inquietud en padres, profesores e incluso alumnos que demandan asesoramiento e intervención en este tipo de problemas.
Un dato muy importante a tener en cuenta, es que el escolar realiza la mayor parte de sus actividades en la posición de sentado en su pupitre o ante su mesa de trabajo, por lo que es de gran transcendencia que la postura que adopte sea la correcta; así, una actitud postural viciosa, es fatigosa y a la larga puede producir daños a veces irreparables en el aparato locomotor.

Es fácil encontrar y cada vez con más frecuencia, en todos los centros escolares, alteraciones de la columna vertebral relacionadas con las actitudes y hábitos posturales erróneos de los escolares. Podemos observar que el mobiliario escolar existente en los centros es homogéneo para todos los alumnos de un mismo ciclo educativo (infantil, primaria y secundaria), en tanto que los alumnos de un mismo curso o ciclo no son homogéneos y; habría que realizar la adaptación del mobiliario escolar a los alumnos teniendo en cuenta el tamaño de su cuerpo (fundamentalmente la talla).También es frecuente observar malas posturas que van adquiriendo éstos al sentarse, agacharse, andar, etc. y el gran peso que transportan a diario en sus mochilas, carteras y carritos, de forma inadecuada la mayoría de las veces. Finalmente, el hecho de que los hábitos posturales puedan ser educables de forma correcta, o más fácilmente corregibles cuanto más precozmente se actúe, hacen que actuaciones de educación postural a estas edades, resulten de gran rentabilidad a la sociedad.

Aparte de las recomendaciones generales ya hechas sobre las posturas más adecuadas en posición de pie de forma estática y al caminar, agacharse, transporte de objetos, dormir, etc, para los escolares se recomienda fundamentalmente:

A.- Programar la actividad escolar:
De forma que se pueda combinar la actividad escolar mayoritariamente en posición de sentado, con juegos, deportes u otras actividades que requieran actividad física.
En casa se seguirá el mismo criterio para las horas de estudio.

B.- Para el transporte del material escolar:
•             Llevar a diario sólo lo necesario.
•             Utilizar preferentemente "Carrito" (y mejor empujándolo que arrastrándolo), o Mochila Central, apoyada en los dos hombros y con cincha o anclaje en la cintura (Fig. 10). De ser Cartera, Bandolera o Bolso (lo cual no es recomendable), cruzarla y aproximarla al cuerpo.

 bolsas y mochilas

C.- Mobiliario Escolar:
La altura adecuada de la mesa es cuando el plano de ésta coincide con el pecho del niño. La silla debe tener un tamaño proporcional a la mesa, y ambas deben estar en relación con el tamaño del niño (evitar los mobiliarios estándar).

•             Sentarse correctamente y evitar giros repetidos y forzados de la columna (mirar al compañero de atrás).
•             Estará sentado correctamente si apoya los pies en el suelo, con las rodillas en ángulo recto con las caderas, y éstas con el tronco. Si los pies no llegan al suelo poner un taburete para apoyarlos. Apoyar la espalda firmemente contra el respaldo de la silla (si es necesario utilizar un cojín o una toalla enrollada para la parte inferior de la espalda). La mesa ha de estar a la altura del pecho del niño y próxima al mismo.
•             Escribir en la pizarra a una altura adecuada (evitar la híperextensión de la columna si se escribe demasiado alto o posturas muy forzadas si se hace en la parte baja).

Evitar que el niño pase muchas horas viendo la televisión, pues continuaría en posición sentado, intentando sustituirlas por prácticas deportivas o juegos.

Estimular la práctica de ejercicio físico y deporte pero teniendo en cuenta que no ha de hacerse de forma abusiva y evitando que practique actividades o deportes que le causen molestias, consultando al médico ante la aparición de éstas.

HIGIENE POSTURAL EN EL MEDIO LABORAL

Al realizar el trabajo hay que tener en cuenta los factores relacionados con el entorno ocupacional y laboral: los trabajos que se hagan de forma repetitiva, los levantamientos de pesos, las posturas mantenidas en el trabajo, las rotaciones y las vibraciones de vehículos o máquinas, etc., suelen ser perjudiciales. Una postura mantenida tanto de pie como sentado es motivo de dolor lumbar.

Es de gran importancia mantener una postura de trabajo adecuada y que el material y mobiliario con que trabajamos esté adaptado a nuestras características.

Se intentará actuar sobre los malos hábitos posturales corrigiéndolos, pero también hemos de tener en cuenta que las causas de adoptar posturas forzadas dependen principalmente de factores relativos a las condiciones de trabajo: diseño de los puestos de trabajo, organización del trabajo, iluminación, exigencias de las tareas tanto físicas como visuales, mobiliario, etc.

Casi todas las profesiones tienen sus riesgos e influyen en el desencadenamiento de las lumbalgias. Por ello, hay que estudiar separadamente cada una de ellas. No obstante, las recomendaciones dadas en relación con la higiene postural pueden ser válidas para la mayoría de ellas.

¿Dolor de espalda en la oficina?


Si trabajas en una oficina todo el día seguro que sabes perfectamente lo que es tener dolor de espalda. Y es que con la postura que adoptamos sentados en la mesa durante mucho rato y el sedentarismo que esto conlleva, lo más normal es que nos duela esta zona. Te damos algunos consejos para que, al menos consigas reducir al mínimo las molestias en la espalda y cervicales producidas por las horas de trabajo.

Para empezar, es importante que trates de no quedarte estático. Deberías intentar levantarte al menos una vez cada hora de tu despacho (aunque sea por un par de minutos) y moverte un poco por la planta. Incluso puedes hacer pequeños estiramientos durante un minuto.

Otra de las cosas que contribuye a que tengas un potente dolor de espalda cuando trabajas en una oficina es que te pases horas enganchada al teléfono, con la mala postura que esto conlleva. Unos auriculares que te eviten sujetar el auricular serán suficientes para evitarte molestias en cervicales, espalda y hombros.

La posición que adoptas cuando trabajas también resulta clave para evitar problemas y dolores. Debes asegurarte de que la parte superior de la pantalla esté ligeramente más alta que la altura de los ojos y que tu asiento tenga la altura perfecta para que los pies reposen completamente en el suelo o en un reposapiés. Incluso debes tener en cuenta que tus rodillas queden flexionadas en un ángulo adecuado, que no las fuerce y las pueda resentir a posteriori.

Acabamos insistiendo en la importancia de que no te quedes quieto en el despacho. Una buena opción es que dejes de usar el teléfono y el correo electrónico para comunicarte con tus compañeros de trabajo. Levántate y habla con ellos: además de favorecer tus relaciones, te ayudará a mejorar tu espalda